José Miguel, Guatemala

Historia

Cómo José pudo beneficiarse de una segunda oportunidad para continuar sus estudios en Guatemala

Con el objetivo de que ningún niño quede rezagado, la UNESCO publicará el 7 de abril un informe mundial sobre el abandono de la educación por parte de los niños. Este informe demuestra que hoy en día hay más niños que niñas sin escolarizar y que queda mucho por hacer para lograr avances en la educación para todos. Apoyar la educación de los niños no significa en cambio que las niñas van a salir perdiendo. 

Conozca a José Miguel Tzul, futuro abogado de 28 años, originario de Totonicapán (Guatemala). José Miguel participó en el programa Masculinidades positivas de los Centros UNESCO-Malala y recibió una beca para continuar sus estudios. La UNESCO lo entrevistó acerca de sus estudios, desafíos y aspiraciones.

¿A qué dificultades tuvo que hacer frente al continuar sus estudios?

Cuando era joven, tuve que dejar mis estudios y no pude completar mi educación secundaria debido a nuestra situación familiar. Soy el mayor de mis hermanos y, por razones económicas, tuve que ayudar a mis padres financieramente para cubrir las necesidades de nuestro hogar. Decidí privilegiar la educación de mis hermanos y hermanas antes que la mía, ya que no teníamos los medios necesarios. Pero tras reflexionar un poco, decidí regresar a la escuela, me inscribí entonces en el programa de educación no formal del Ministerio de Educación y obtuve mi diploma de bachiller al cabo de dos años.

¿Cuál fue su experiencia en los Centros UNESCO-Malala? ¿Qué aprendió?

Después de que obtuve mi diploma en el instituto de enseñanza secundaria, recibí una beca mediante los Centros UNESCO-Malala, gracias a Sandra, una promotora del programa en el Centro de San Andrés Xecul.

El Centro me apoyó mucho para que continuara mis estudios. Recibí una tableta y manuales para seguir los cursos – esto era algo muy importante para poder obtener mi diploma de estudios secundarios. Pude familiarizarme con los dispositivos digitales y con el proceso de aprendizaje autodidacta, sobre todo durante el cierre de las escuelas vinculado con la COVID-19.

¿Cuál fue su mayor reto en lo relativo al aprendizaje?

Durante el cierre de las escuelas vinculado con la COVID-19 no pude encontrarme con mis compañeros de clases en la escuela ni intercambiar con ellos. Tenía que encontrar suficiente dinero para pagar el Internet los días en que tenía cursos en línea. Esto resultaba difícil, pero gracias a la beca que recibí obtuve una tableta electrónica que me permitió conectarme a mis cursos, investigar y acceder a todos los materiales de estudio. Obtuve mi diploma de segundo ciclo educación secundaria con especialidad en contabilidad y administración.

Está muy activo en su comunidad. ¿Cómo los Centros le ayudaron a dirigir a sus compañeros?

Participé en talleres propuestos por los Centros y la formación que proporcionaban me ayudó mucho a convertirme en líder en mi comunidad. Actualmente trabajo para servir a mi comunidad. Los talleres sobre las masculinidades positivas me llevaron a reflexionar sobre la manera en que nosotros, los hombres, discriminamos a las mujeres y cómo se desarrollan estos procesos en nuestras comunidades. Estos talleres nos han abierto la mente y nos han permitido entender mejor que en una sociedad todos somos importantes y todos valemos por igual.

Debemos compartir los conocimientos que hemos adquirido en los talleres con los miembros de nuestra familia y con nuestros hermanos para romper los paradigmas de nuestra sociedad y construir un mundo en el que todos seamos iguales.

¿Cuáles son sus expectativas con respecto a su educación y su futuro?

Deseo continuar mis estudios en la universidad y convertirme en abogado, ya que esta es mi pasión. Me gustaría ayudar a las personas que lo necesitan e implicarme en los grupos juveniles para ayudarlos a convertir en realidad sus sueños. Quiero compartir mi experiencia y mis conocimientos para ayudarlos a alcanzar sus sueños. Nunca es demasiado tarde para lograr nuestros objetivos en la vida.

¿Qué le gustaría decir a los jóvenes con respecto a su educación?

Sigan estudiando, incluso cuando atraviesen momentos difíciles. La educación es muy importante para abrir las puertas. Busquen los Centros o los programas que puedan ayudarlos a realizar sus sueños, para que podamos colaborar con nuestras sociedades y ayudar a nuestras comunidades y a las personas que lo necesitan.

Los Centros UNESCO-Malala  fueron creados en Guatemala entre 2018 y 2021 para reforzar las políticas en favor de la igualdad educativa de las mujeres a escala nacional y para desarrollar la educación de las niñas, las adolescentes y las mujeres indígenas en las tierras altas occidentales de Guatemala. En el marco de este trabajo, un programa sobre las “masculinidades positivas” benefició a 50 hombres jóvenes indígenas ayudándolos a que continuaran sus estudios. Aunque el proyecto se centra fundamentalmente en el empoderamiento de las mujeres indígenas y en su reinserción educativa, también genera oportunidades que permiten que hombres jóvenes como José Miguel continúen sus estudios.