Mzee Bwanika (à droite) avec Bbaale Richard meilleur acteur de l'année lors des Pearlwood Awards 2020

Historia

Los cineastas ugandeses se abren camino en la industria artística

Un guion que por fin se convierte en película

Todavía no ha amanecido en Kampala y Mzee Bwanika Julius prepara su primer café. El reloj acaba de marcar las cuatro de la mañana y Mzee espera con ansia las tres horas que tiene por delante antes de comenzar su trabajo en la oficina. En el silencio de la madrugada, vuelve a escribir su último guion, en el que ha estado trabajando durante las últimas semanas. Su pasión por el cine como director y productor ugandés le ha llevado a compaginar su carrera creativa con la gestión cultural dentro de la industria cinematográfica.

Mi pasión proviene del público que ve mi trabajo. Por eso me he dedicado a desarrollar una estructura vibrante en el mercado cinematográfico.

Mzee Bwanika JuliusSecretario Ejecutivo - Pearlwood

A las ocho de la mañana, Mzee ya está en la oficina de Pearlwood, la institución paraguas de todas las entidades de la industria cinematográfica ugandesa, donde trabaja como Secretario Ejecutivo. 

Con casi 20 años de experiencia en producción cinematográfica, Mzee ha desarrollado su carrera en la industria, ya sea como actor, guionista, productor o cineasta, y ha trabajado en más de quince películas. Fue testigo del auge del cine en Uganda en la década de 2000, estimulado por las tecnologías digitales, la consolidación de la televisión local y la pérdida ayudas públicas al teatro.

Este florecimiento del sector, sin embargo, no ha ido acompañado de una adecuada regulación. Por el contrario, durante muchos años las funciones de regulación estuvieron dispersas entre agencias estatales que estaban poco coordinadas entre sí. Como consecuencia, la industria experimentó un desequilibrio en detrimento de los realizadores, que a menudo veían su trabajo mal pagado, a pesar de ser este bien recibido por el público local. Del mismo modo, los profesionales del cine solían tener dificultades para acceder a los lugares de rodaje y se veían obligados a pagar impuestos que incrementaban los costes de producción.

Para mitigar esta situación, el Ministerio de Género, Trabajo y Desarrollo Social de Uganda, en asociación con la UNESCO y la Unión Europea, lanzó el proyecto "Creación de incentivos fiscales para apoyar el desarrollo local y la profesionalización del sector cinematográfico en Uganda". Esta iniciativa aborda el problema de los altos costes de producción cinematográfica a través de incentivos fiscales para el sector.

La iniciativa es parte de una visión de la cultura como motor del desarrollo económico, establecida en el Tercer Plan Nacional de Desarrollo de Uganda 2020/21 - 2024/25. El proyecto mapea las brechas en las políticas culturales cinematográficas, ha dado lugar a talleres de fortalecimiento de capacidades y a espacios de colaboración entre el Estado y los actores no gubernamentales.

Molly Nakamya y Mzee comparten la pasión por el cine y ambos creen que crear un entorno de apoyo es clave para el desarrollo de la industria. En 2020, Molly fue nominada como persona de contacto para la Asociación de Instituciones de Capacitación en Cine y Video y, como tal, invitada a participar en la primera fase del proyecto "Creación de incentivos fiscales para apoyar el desarrollo local y la profesionalización del sector cinematográfico en Uganda".

Nakamya acompañó las consultas para identificar los desafíos del sector cinematográfico emergente en el país en la primera fase del proyecto. Para ello, se celebraron cuatro talleres regionales. En ellos se señalaron como retos el acceso limitado a la financiación, la insuficiente capacidad y capacitación, la inaccesibilidad a equipamiento moderno y las limitaciones del mercado y de las redes de distribución de películas. Estos hallazgos permitieron posteriormente desarrollar y aplicar medidas estratégicas en posteriores fases del proyecto.

Nakamya resume con entusiasmo cómo este proyecto ha mejorado la vida de la comunidad cinematográfica:

Estamos muy agradecidos por esta oportunidad de discutir el desarrollo de la industria cinematográfica en Uganda con expertos y académicos. Compartir con ellos nos abrió la mente sobre cómo crear un ambiente de trabajo amigable para los cineastas en Uganda.

Molly NakamyaAsociación de Instituciones de Formación en Cine y Vídeo

Nalubega Hajara trabaja como Oficial Superior de Cultura en el Ministerio de Cultura. Apasionada por mejorar el sector cultural y la vida de sus profesionales, soñaba con "ver florecer la industria cinematográfica con productos competitivos y de alta calidad dentro de Uganda y en todo el mundo". Participó en el lanzamiento del proyecto y en la orientación de los 23 representantes del equipo nacional de la industria cinematográfica, que incluyo miembros de la sociedad civil. También ha participado en consultas con beneficiarios y agencias gubernamentales, así como en actividades de involucramiento y desarrollo de capacidades.

La segunda fase del proyecto consistió en un intercambio entre pares enfocado a la capacitación. Con este fin, los profesionales de la industria ugandesa celebraron varias sesiones de trabajo con sus pares sudafricanos y kenianos. En este marco, desarrollaron ejercicios de evaluación comparativa en los que se analizaron buenas prácticas de política cinematográfica en Sudáfrica y Kenia.

Entre marzo y abril de 2021, treinta profesionales también fortalecieron sus capacidades para la formulación de políticas participativas durante un taller en Kampala. Como resultado se recomendaron medidas estratégicas para resolver los desafíos identificados, así como planes de acción y criterios de evaluación. Estas medidas se han presentado como proyecto a los organismos gubernamentales para su examen.

Nalubega explica cuántos cineastas han regresado al negocio:

El proyecto atrajo de vuelta a muchos cineastas con el incentivo de una mayor capacidad de generación de ingresos. Al priorizar al sector en las políticas públicas, se ha revelado el potencial de esta industria cuando recibe el apoyo adecuado.

Nalubega HajaraResponsable de Cultura, Ministerio de Cultura

Gracias al proyecto se ha incluido una categoría de cine en el Fondo de Innovación del país para 2021/2022. Sobre todo, en abril de 2021 se lanzó la plataforma audiovisual Kibanda Xpress, que ofrece un catálogo de películas ugandesas con una cuota de suscripción subvencionada y sin costes de conexión.

Mzee está muy satisfecho con lo que ha conseguido a través de este proyecto. Como él afirma, la iniciativa ha construido un puente entre los profesionales del cine y el Gobierno. Esto ha llevado a un trabajo más consciente y estratégico.

El proyecto nos hizo reconocer en nosotros un potencial inexplorado, y a través de él, hemos podido reorganizar y lograr una plataforma de distribución de películas digitales.

Mzee Bwanika JuliusActor, guionista, productor y cineasta

 

Cae la tarde en Kampala, y Mzee apaga su computadora para ir a casa y pasar un tiempo con su familia. En el camino, juega con algunas ideas sobre cómo continuar su guion a la mañana siguiente, sabiendo con más certeza que nunca que, una vez terminado, llegará en forma de película a las pantallas del público ugandés.