¿Recuerda la primera vez, durante su infancia, que trabajó en un proyecto artístico? Era una expresión de usted mismo, algo que surgió de la nada, algo que creó. ¿Qué tal una excursión escolar a un museo o a un parque nacional? Quizá recuerde que le parecían más grandes, con descubrimientos por hacer y maravillas que contemplar. En muchos sentidos, estas experiencias reflejan lo que ha forjado su identidad y le han convertido en lo que es. Son parte de su cultura.
Aunque no resulten evidentes a primera vista, el arte, la expresión y la cultura proporcionan poderosos medios en lo relativo a la sostenibilidad y la educación. La educación para el desarrollo sostenible (EDS) pretende aportar un enfoque holístico e interdisciplinario que pueda garantizar que la sostenibilidad esté presente en cada uno de nosotros. La educación artística y cultural, como componente de la EDS, puede dotar a los educandos de todas las edades de los conocimientos, competencias, valores y actitudes necesarios para afrontar diversos retos, desde el cambio climático y la degradación del medio ambiente hasta la pobreza y la desigualdad. Mediante la expresión creativa, la sostenibilidad puede verse de muchas formas diferentes a través del mundo.
Aprender a cuidar el planeta mediante el arte
En Brasil, la escuela de educación básica Colégio Santa Chiara de Aracaju (Sergipe) puso en marcha el programa “Globinho Activists” para enseñar la sostenibilidad a los alumnos. Estos aprendieron a conocer los ríos y corrientes de agua de su región y entendieron la importancia del agua y cómo los ríos locales están conectados a los sistemas de alcantarillado donde viven. En estas comunidades, los desagües de las alcantarillas suelen verse o utilizarse como cestos de basura, pero después de conocer la importancia del ecosistema acuático los alumnos querían que estos puntos de entrada recordaran el sitio a donde llegaban los desechos. La belleza de los ecosistemas acuáticos empieza aquí, ilustrada mediante el arte.
El arte también puede servir de vínculo entre los alumnos y la sostenibilidad y las cuestiones culturales utilizando materiales y la naturaleza. El Busleyden Atheneum Pitzemburg, una escuela de la RedPEA de la UNESCO en Bélgica, enseña a sus alumnos los ODS mediante el aprendizaje basado en proyectos. Uno de los proyectos se centra en la minería en la República Democrática del Congo, donde decenas de miles de personas (incluidos niños) trabajan en condiciones que ponen en peligro sus vidas en minas subterráneas. En la escuela, los alumnos llevaron a cabo un proyecto de un año de duración en el que aprendieron sobre la historia del país, la industria minera y el conocimiento de los elementos que se extraen, que dio lugar a una instalación en forma de mapa de la República Democrática del Congo. A primera vista, una serie de azulejos esmaltados con cobalto parecen bonitos, pero poco ordinarios. Sin embargo, las vivencias que los alumnos obtienen de estas experiencias durarán toda la vida.
Sin duda, el arte y la cultura se expresan de múltiples formas diferentes, y el teatro, el cine y las canciones pueden utilizarse también como herramientas para evocar emociones y crear vínculos entre las personas y las cuestiones de la sostenibilidad. En un proyecto increíblemente conmovedor, los representantes de la Organización Mundial para la Educación Preescolar (OMEP) en Ucrania muestran a los niños de este país cantando y dibujando sobre la paz. Este vídeo demuestra lo importante que puede ser el arte. (Crédito: Tetyana Kovalyova, responsable de la OMEP de Ucrania).
Museos: Plataformas para participar y aprender más sobre sostenibilidad
Los museos también pueden ser portavoces activos de la sostenibilidad. Dado el papel tradicional que desempeñan como instituciones fiables de aprendizaje y conocimiento, de narradores y proveedores de historia y sociedad, los museos son un lugar natural para celebrar los vínculos entre el arte, la narrativa y la sostenibilidad. El programa Ki Futures, iniciado en 2022, ha colocado al sector cultural como líder en la lucha por un futuro sostenible. Mediante este programa, los museos se comprometen con prácticas sostenibles y educan a sus visitantes. Un buen ejemplo de empoderamiento de una comunidad marginada mediante la EDS proviene del Museo Moderno de Buenos Aires (Argentina). El museo organizó un programa en el que se invitó a la población local sin techo a crear obras de arte para exponerlas, así como una oportunidad para que los artistas vendieran sus obras. Esta exposición constituyó un compromiso único e integrador con comunidades tradicionalmente excluidas.
Un futuro sostenible puede lograrse haciendo que los educandos participen en entornos que nos vinculen personalmente con las cuestiones relativas a la sostenibilidad. Puede que los hechos y las cifras no siempre hablen por sí solos, pero mediante el arte, las canciones y nuestra cultura podemos dar vida a la sostenibilidad. En todas las comunidades hay ejemplos de cómo la gente utiliza la expresión creativa y la cultura. Estas expresiones artísticas y culturales son un gran proceso de aprendizaje permanente y una parte integral de la educación de calidad que debe integrarse aún más dentro de los marcos académicos tradicionales y, lo que es más importante, incorporarse a todos los aspectos de nuestra vida cotidiana.
Han contribuido en la redacción de este artículo Caitlin Southwick, Ki Cultures
- La labor de la UNESCO en materia de educación para el desarrollo sostenible
